Amazonas- Epilogo-2 Mundo Externo

Mundo Externo. Epílogo 2

En la segunda parte de «Amazonas» (mundo externo) se analizan, una por una, las consignas que nos han convertido en humanos. Para, a continuación, exponer los códigos o herramientas que nos permiten superar el pasado.

Nace el concepto de paternidad

«Cuando la humanidad tomó conciencia de la relación existente entre cópula y concepción, empezó a considerar a sus crías como propiedad privada en vez de considerarlas patrimonio común del clan o tribu al que pertenecían.» El patriarcado como tal, y con todas sus consecuencias, se impuso como una nueva variable evolutiva cuando los humanos tomamos conciencia de que los hijos procedían del esperma del hombre y no solo del vientre de las mujeres.

Ante esta nueva realidad, la conciencia de hombres y mujeres nació al concepto de paternidad con el fin de actualizar los registros evolutivos de la conciencia corporal/inconsciente, ligada a la figura femenina. A la conciencia mental/consciente, ligada a la figura masculina.

Proyección de lo femenino en lo masculino

En todo caso, siempre ha sido una proyección de lo femenino en lo masculino, lo que se ha registrado como cultura patriarcal. En última instancia, el género masculino solo exterioriza el nivel de conciencia que recibe de parte de su madre o esposa. Tengo la certeza de que, en la medida que la mujer ha ido tomando conciencia de su propia evolución, gracias a su reflejo en la figura masculina, la evolución de nuestra conciencia como personas se ha tornado posible. Teniendo presente que son estas mismas mujeres las que transfieren, generación tras generación, la memoria emocional a hijos e hijas.

Madre no hay más que una

En los últimos años se observa una demanda mayor en la colaboración de los padres en . Por mi parte, pienso que una cosa es conciliar el tema convivencia y labores del hogar, en cuyo caso estoy completamente de acuerdo. Y otro muy distinto, la intervención del padre como figura emocional en el tiempo de crianza del bebé, que origina fijaciones que más tarde hay que restaurar en el mapa emocional personal.

Esta demanda de colaboración en el tiempo de crianza, por parte de la figura paterna, (la pida quien la pida), se produce por una falta de integración hemisférica de la madre.  Teniendo en cuenta que las madres inseguras de su instinto maternal necesitan una mayor atención consciente durante este proceso. Si algo debiéramos de tener superado las mujeres, a lo largo de nuestra evolución como especie, es el proceso de dar a luz y criar a los hijos.

Aclaro que esta postura es solo con relación al tema maternidad o tiempo de crianza, ya que el tema de la paternidad, siempre que sea consciente, es cosa de dos.

Conciencia unitaria

Tras la integración de la participación del varón en el proceso de concepción de los hijos. La siguiente secuencia de instalación en el área del desarrollo humano está por ejecutarse y tiene que ver con la percepción errónea de lo que, en verdad, es una pareja sentimental. Esta falta de visión unitaria hace que la relación entre padres e hijos se haya convertido en un campo de batalla, en el que cada uno de los hijos toma partido por un progenitor u otro, en función del ambiente que reine en casa durante su infancia.

En este tema la voluntad no interviene pues todo opera bajo el formato emocional y serán las emociones familiares las que configuren la personalidad del niño.

Dos Polos Una Misma Unidad Evolutiva

Por mi parte considero que la prioridad evolutiva, en estos momentos, es unificar el concepto de pareja/padres y llegados a este punto, la madre se vuelve operativa al 100% y el padre/ego queda liberado. Lo que cambia por completo el panorama familiar y social:

Cuando un hijo crece en una familia unificada lo hace observando como su padre es el reflejo exacto de su madre. En esta forma sus hemisferios son sincronizados desde el primer día. Será una persona centrada en su interior y satisfecha en el exterior sin personalismos de ninguna clase. Siempre en función de lo que el mundo le demande, pero sabiendo mantener sus coordenadas vitales en el presente.

Se acabaron los conflictos con la autoridad

La falta de coherencia en las parejas, por desconocimiento de que son una unidad energética-funcional, hace que los hijos se polaricen, de forma automática, a favor o en contra de la figura paterna para compensar las propias carencias. Esta polarización es lo que hace que, al crecer e integrarse en sociedad, rechacen o acepten las cuestiones sociales y políticas desde un ángulo de «derechas» (patriarcado; regidos por el hemisferio izquierdo) o de «izquierdas» (matriarcado; regidos por el hemisferio derecho).

 ¡Fin de la lucha de género y de clases!

mano con pulgar hacia arriba

«Amazonas» va de cómo los humanos adquirimos la conciencia de género y de cómo superar los problemas que la diferenciación genérica ha generado en las personas. Para su mejor integración es recomendable descargar en primer lugar los cursos online «Ser Mujer» y «Ser Pareja Hoy».

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